Por: Mariana Gándara mgandara@infobae.com
En la última década, el número de artistas
menores de 30 años creció un 28%. Además, a los 18 comienzan a mostrar
sus primeras obras en el circuito comercial y a posicionarse ante nuevos
compradores
En los
últimos diez años el número de artistas jóvenes creció un 28% y cada vez
son más los que buscan formarse en carreras vinculadas al arte y
sumarse al staff de galerías emergentes, según la Asociación Argentina
de Galerías de Arte (AAGA).
Esta tendencia se viene imponiendo con fuerza desde hace una década en la Argentina y son muchos los adolescentes que comienzan a mostrar sus obras en el circuito comercial a temprana edad.
"Por un lado creció la cantidad de carreras terciarias y universitarias relacionadas con la producción en arte
y la gestión cultural. Esto es un gran incentivo que se traduce en
artistas jóvenes produciendo arte, con ganas de mostrarse, y galeristas
con formación en gestión cultural que quieren mostrar esas producciones.
Esta combinación da como resultado un público joven que se acerca al
arte para disfrutarlo y comprarlo; de esta forma se activa un mercado
nuevo del arte", explicó Solange Guez, miembro de AAGA.
Si bien no hay cifras al respecto, sí hay una tendencia en crecimiento de la apertura de galerías jóvenes en los últimos años. Pequeños
reductos que ofrecen, además de obras, talleres y actividades en donde
los de temprana edad cada vez están más presentes.
"Se
está produciendo un cambio fundamental. Hace un tiempo se esperaba que
la producción de un artista se desarrollara antes de incorporarlo en el
circuito comercial, entre los 25 y los 30. Actualmente, cada vez hay más
galerías dirigidas por jóvenes que trabajan con artistas contemporáneos
a su edad y que atraen compradores que realizan sus primeras
inversiones en arte", añadió Guez.
Aunque el arte
siempre estuvo ligado al lujo y a una selecta parte de la población, el
gran crecimiento del circuito de galerías y ferias ampliaron su consumo
en el mercado. Variedad de precios y artistas de todo tipo hicieron de este un espacio democrático en el que todos pueden participar.
El
selecto ambiente del artista mutó. Se transformó en una actividad más
masiva en la que no hace falta ser un gran entendedor para incursionar
en el rubro de la compra de arte y, a su vez, con propuestas más
accesibles, lo que también favorece el acercamiento de los jóvenes.
Otra
muestra de esta tendencia son las bienales apuntadas a artistas
jóvenes, como La Bienal, organizada por el Gobierno de la Ciudad de
Buenos Aires, la Bienal de la Frontera de México o la Bienal de Arte de
la Universidad Nacional del Litoral (UNL), que sumaron una nueva
categoría que va de los 14 a los 18 años, impensado hasta hace un
tiempo.
Por su parte, el artista Julián Gatto piensa que
lo que está ocurriendo no es una casualidad: "No me parece raro que la
gente joven se vea atraída, porque el arte es una manera bastante amplia
y abierta de tratar de entender y navegar por la vida".
"Estamos
viviendo en una época donde las contradicciones y las tensiones en
nuestras vidas son cada vez más evidentes y el arte es una disciplina
que tiene mucha cintura para lidiar con este tipo de problemáticas, ya sea denunciando una situación, conciliando opuestos, abrazando contradicciones o generando mayor tensión", señaló Gatto.
En
este contexto, la feria EGGO, que se desarrollará del 6 al 9 de
septiembre en el Centro Cultural Recoleta, creó un programa llamado
Galerías Recientes. "Está destinado a impulsar galerías nuevas que
representan artistas jóvenes en el mercado y que estén dando sus
primeros pasos en el circuito comercial", aseguró Alejandra Laurenzi,
una de las organizadoras.
Christian Nunclares y Charo
Subero son los responsables de Cobra Galería, un pequeño espacio ubicado
en una esquina de Caballito. Ellos analizaron que siempre existieron
artistas jóvenes, pero que la amplia variedad de talleres, carreras y
cursos que hay en la actualidad hicieron que aumentara la visibilidad y
el diálogo entre ellos, promoviendo nuevas formas de expresión.
El
mercado del arte está cambiando y esta modificación se debe, en gran
parte, al constante incremento de jóvenes en este ámbito. Con nuevas
galerías, más variedad de propuestas y un amplio abanico de precios, la
democratización del arte sigue dando pasos agigantados.
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