miércoles, 28 de mayo de 2014

Literatura infantil para todos

Literatura infantil para todos



 Por Milagritos Franco

Siempre es un placer ver a las maestras del nivel Inicial narrar con nítida y expresiva voz cuentos y, más aun, ver cómo sus pequeños estudiantes se alegran o entristecen con lo acontecido y cómo en un acto, en apariencia tan sencillo, la palabra se convierte en “una piedra en el estanque” que crea ondas imaginativas como afirmaba el gran maestro Gianni Rodari.

Frecuentemente, el primer contacto que tiene el niño con la lectura se produce en el seno familiar. Son los padres quienes con cálida voz cantan o narran rondas, nanas, canciones y cuentos. Sin embargo, también, podemos afirmar que un significativo número de niños vive, por primera vez, esta experiencia en la escuela. Cabe precisar que ambos encuentros con la lectura son diferentes, el padre lee para compartir con su hijo: el disfrute y el gozo dominan este momento. Aproximan a sus niños al mundo letrado sin formalismos ni planificación mientras que el maestro aborda la literatura infantil en forma intencionada y sistematizada.

La literatura infantil acerca a los niños a los códigos de la lectura y la escritura, desarrolla sus capacidades expresivas y comunicativas, potencia la imaginación y la diversión. Por ello, la pertinencia de integrarla a la programación: plantear indicadores de logro claros que evidencien el desarrollo de procesos cognitivos, metacognitivos, consolidación de hábitos, comunicación entre el adulto y el niño e integración a la sociedad.

Una puerta a la lectura y a la escritura

La literatura infantil ofrece referentes de cómo comunicarse; facilita los procesos para el aprendizaje de una lengua, ya que fortalece la atención, la comprensión, la retención y la imitación. El niño comienza a imaginar lo narrado, lo cantado, lo descrito, integrando su lenguaje y sus experiencias previas: su cerebro se prepara para la lectura. Pero, qué sucede si en la selección de libros solo priorizamos las situaciones reales y no hacemos volar su imaginación; entonces, solo comprenderá lo objetivo, lo explícito y los procesos cognitivos necesarios para leer y escribir se desarrollan en forma parcial. En la tarea de sistematizar el trabajo con la literatura infantil conviene establecer criterios de selección en función a competencias. Algunas estrategias para esta trabajo son las siguientes:

  • Desarrolle la observación y la atención mediante los libros con ilustraciones o libros álbum.
  • Fortalezca la experiencia previa a través de historias vinculadas a sus necesidades.
  • Incremente el vocabulario a través de los pictocuentos. La colección Miss Rosy propicia la interpretación de imágenes y la formulación de anticipaciones.
  • Considere obras que incluyan elementos fantásticos. Una historia de chanchos astronautas, peces bailarines y loros piratas (Cómo te vaca de Juan Luis Dammert) gusta a los niños por la trama sorprendente y sus protagonistas. Los animales son sus preferidos a esta edad.
  • Incluya poemarios. Si trabaja con Caballo de madera y otras canciones de Jorge Eslava, podrá diseñar actividades de consolidación de la conciencia fonológica a partir de una propuesta lúdica. La repetición intencional de palabras favorece la identificación de sonidos iniciales y finales: el niño comienza a comprender el concepto de palabra. 

La lectura enseña a convivir con los demás
Una de las variantes más contextualizadas para enseñar a los niños los mecanismos de la socialización, de la convivencia pacífica, de la comunicación de emociones es el cuento. En el marco de una situación verosímil como la del cuento Josefa y ¿quién dijo miedo? los niños aprenden a expresar sus emociones y a entender las de sus compañeros (empatía). Sin embargo, para que este objetivo se alcance es necesario que el docente acompañe la lectura, no solo leyendo el cuento, sino promoviendo la conversación, la identificación con los personajes, la expresión de opiniones.

El desarrollo de las competencias socioafectivas requiere de una adecuada selección de lecturas que permita abordar valores necesarios para mantener relaciones cordiales con las personas, como la tolerancia, el trabajo en equipo o la responsabilidad. 





El desarrollo de la competencia comunicativa

A través de la interacción oral, en la escuela, el niño empieza a descubrir el efecto de sus mensajes en las actitudes de los demás. De darse las condiciones y las respuestas que él desea comenzará a presentar sus ideas y sentimientos cada vez con mayor claridad, pudiendo utilizar variadas formas, no solo escritas; es decir, desarrolla sus habilidades y destrezas conversativas. Por ello, la necesidad de plantear actividades y estrategias que lo conduzcan al aprendizaje de la lectura y la escritura, como:
  • Promover diálogos y conversaciones.
  • Permitir comentar el hecho que los sorprendió o decepcionó.
  • Dramatizar la historia, enfatizando el lenguaje corporal.
  • Dibujar pasajes del texto, a los protagonistas o el lugar.
  • Cantar con ellos las canciones que incluyen los libros o recrear las propuestas.
  • Modelar los personajes con plastilina, barro, papel maché.
  • Recitar con ellos adivinanzas, rimas, poemas. 

Capacidad de inventiva
Para representar, recrear, simbolizar mentalmente lo que trasmiten las palabras en una canción o un cuento es necesaria la imaginación. Así, para algunos niños el desván del abuelo de Los zapatos al revés (Rosa Cerna) será muy oscuro y se parecerá a un cuarto desocupado de su casa, para otro será la habitación de su abuelo a la que nadie ingresa sin permiso. Cada uno le otorgará un matiz diferente y empleará sus propios recursos; el único factor común será la gran dosis de fantasía.

Las actividades que elegimos o diseñemos, por lo tanto, deben orientarse al disfrute, al pensamiento divergente, a las respuestas disparatadas a la exposición de su imaginación. Acercar a los niños al mundo letrado nunca debe ser un camino predecible y muy bien trazado. Debemos cantar, recitar, realizar juegos verbales, leer con gran expresividad, presentar materiales muy variados (videos, láminas, dibujos, títeres, etc.), pero sobre todo asumir este proceso como un trabajo de orfebre que se realiza con dedicación y amor.

Es imperioso sintonizar con los intereses de nuestros estudiantes y para ello nada más conveniente que recurrir a todas las fuentes: tradicionales y modernas. Recordemos que cada niño es diferente y si bien es una utopía orientar la lectura en función a veinte títulos diferentes, sí es viable elegir el libro que despierte su imaginación y preparar actividades inolvidables que se atesoren como el mejor de los libros. 

 http://www.colgadodelalectura.com/maestros-articulos/literatura-infantil-para-todos/

Siempre es un placer ver a las maestras del nivel de Inicial narrar con nítida y expresiva voz cuentos y, más aún, ver cómo sus pequeños estudiantes se alegran o entristecen con lo acontecido, y cómo en un acto en apariencia tan sencillo la palabra se convierte en “una piedra en el estanque” que crea ondas imaginativas, como afirmaba el gran maestro Gianni Rodari.
‪#‎Maestrostips‬: “Literatura infantil para todos”

Siempre es un placer ver a las maestras del...
colgadodelalectura.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario