viernes, 20 de junio de 2014

San Juan y el bombardeo del ‘55

CASOS QUE CONMOCIONARION A SAN JUAN

San Juan y el bombardeo del ‘55

El 16 de junio de 1955, San Juan se sumaba al repudio nacional del bombardeo ocurrido en la Plaza de Mayo, Buenos Aires. Toda una provincia conmovida salió a las calles a protestar. Por Michel Zeghaib.


VIERNES, 20 DE JUNIO DE 2014
San Juan y el bombardeo del ‘55
Por Michel Zeghaib
Tiempo de San Juan
Era la primera vez en la historia argentina que las Fuerzas Armadas bombardeaban a su propio País. El objetivo era derrocar al presidente Juan D. Perón. En San Juan, la repercusión de esta masacre generó que miles de personas salieran a las calles en actitud de repudio al ataque, y de lealtad al General. Desde el 14 hasta el 20 junio de aquel año, los sanjuaninos se solidarizaron con los hechos ocurridos organizando una serie de manifestaciones que incluían actos de desagravio a labandera nacional y paros por tiempo indeterminado organizados por la CGT local.
El martes 14 de junio, desde muy temprano, la ansiedad y expectativas de los sanjuaninos por todo lo que estaba pasando se expresó a través de vítores a Perón y Eva, además de cánticos que dejaban al descubierto el trasfondo político-religioso que motivó aquel bombardeo. A viva voz podía escucharse en las calles (también de san Juan) “Perón o Cristo” de un lado; y “Perón sí, curas no”, del otro. Es que la Iglesia y los sectores más cerrados de las Fuerzas Armadas fueron los que activaron su resistencia a Perón. Recordemos que en el mes de mayo de ese año ’55 el gobierno nacional había suprimido la obligatoriedad de la enseñanza religiosa que había aprobado años atrás. Gota que rebalsó el vaso.
Entonces, las tensiones entre peronistas y militantes católicos se hacían ver con claridad en las calles. Ese mismo 14 de junio, la Municipalidad de la Ciudad, a través de una carta firmada por el entonces intendente Carlos E. Guimaraes, dirigida al arzobispo de ese momento Mons. Rodríguez y Olmos, emplazaba por término de 15 días a la curia eclesiástica sanjuanina para que retire de la Plaza 25 de Mayo la construcción de emergencia que había instalado para ejercer el culto.
La sede del partido justicialista, la Delegación Local de la CGT, las plazas, incluso una esquina cualquiera; eran, entre otros, los lugares elegidos por los manifestantes. Los diarios de la época registraron una cifra que superaban las 20 mil personas las que habían tapizado las calles de la capital provincial.  Las calles estaban copadas por columnas de masa humana.
El bombardeo tuvo, como se dijo, una clara oposición al régimen peronista que gobernaba el país. Pero, además, fue interpretado como un acto de deshonra a la bandera nacional que había sido quemada a causa de las bombas, justo en el mes en el que se la conmemora. Esto llevó a que aquellos miles de sanjuaninos se unieran a la convocatoria nacional para desagraviarla, cambiando la dirección del foco de atención hacia el 20 de junio que estaba próximo.
¿Quién había mancillado la bandera nacional? Las FFAA y la curia, que se habían complotado para desterrar cualquier posible rastro de justicialismo, atacando los símbolos más significativos, tales como: la Casa Rosada. De hecho, los aviones atacantes, punta de lanza de un alzamiento en varios puntos del país, llevaban en sus colas una “V” y una cruz que señalaban “Cristo Vence”.
Hacia el 17 de junio del mismo año, los ánimos empezaron a clamarse. En Buenos Aires y San Juan comenzaban a poner su mirada en el 20 de junio, día de la Insignia Nacional.
Fuentes:
Tribuna, junio de 1955
Diario de Cuyo, junio de 1955
La Prensa, 17 de junio de 1955

Las palabras de PerónEn recuerdo de la fecha del bombardeo, estas son algunas de las frases que pronunciara Juan Domingo Perón por cadena nacional de radio y televisión aquel 16 de junio de 1955:
- “Lo más indignante es que hayan tirado a mansalva contra el pueblo (…) Es indudable que pasarán los tiempos, pero la Historia no perdonará jamás semejante sacrilegio”.
- Para no ser criminales como ellos, les pido que estén tranquilos; que cada uno vaya a su casa (…) les pido que refrenen su propia ira; que se muerdan, como me muerdo yo, en estos momentos, que no cometan ningún desmán.
- El pueblo no es el encargado de hacer justicia: debe confiar en mi palabra de soldado (…) Sepamos cumplir como pueblo civilizado y dejar que la ley castigue…”
El ataque y sus consecuenciasSobre la Casa Rosada cayeron 29 bombas, otras cayeron sobre la Pirámide y una sobre un trolebús lleno de gente. En la Plaza de Mayo y sus alrededores quedaron los cuerpos de 355 civiles muertos. Los implicados no eran sólo militares. También había numerosos civiles. El alzamiento fue frenado. Pero meses más tarde Perón ya no resistiría.
En San Juan no hubo víctimas ni daños que lamentar. Sólo una masa de gente, en su mayoría peronistas, que se unieron en el dolor.
http://www.tiempodesanjuan.com/notas/2014/6/20/juan-bombardeo-58940.asp

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