La lectura es una interfaz entre la visión y el lenguaje hablado. Una parte emergente de la investigación indica que aprender a leer tiene un fuerte impacto sobre el procesamiento visual no lingüístico, tanto a nivel de comportamiento (por ejemplo, en el tratamiento de la imagen de espejo – enantiomórfico -) como a nivel cerebral (por ejemplo, la inducción de efectos de arriba hacia abajo). Sin embargo, se plantean muchas preguntas con respecto a las naturaleza y las consecuencias de estos procesos que hasta ahora están sin responder. Este libro tiene por objeto contribuir a la comprensión de cómo una actividad tan cultural como la lectura podría modular el procesamiento visual, ofreciendo un foro de referencia en el que los investigadores definen el estado de la cuestión y las direcciones futuras sobre este tema.
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