Meterse con las bibliotecas públicas… ¡a quién se le ocurre! Esta es la historia de un periodista que manifestó a través de Twitter que ya nadie iba a las bibliotecas y que deberían cerrar. Lo que no se esperaba es que 110.000 personas contestarían a ese simple tuit para manifestar la buena labor de las bibliotecas y su necesidad en la sociedad. Por cierto, en el intercambio de tuits también dijo que los bibliotecarios eran gente triste y perezosa. 
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Esperad, esperad… que esta frase no es mía. Os voy a contar una historia de cómo alguien se metió con las bibliotecas públicas y multitud de personas salie
JULIANMARQUINA.ES
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